Los militares de Uruguay han suspendido la
segunda reunión con representantes de los tres partidos autorizados (Blanco,
Colorado y Unión Cívica) para discutir la normalización democrática del país.La
primera de estas reuniones, que se celebraba en un hotel de Montevideo, se
llevó a cabo el pasado día 13.
La causa de
este parón en las conversaciones entre políticos y militares tiene su origen en
el secuestro del semanario Democracia (órgano del Partido
Blanco), el mismo día de la llegada de los Reyes de España a Montevideo, y su
posterior suspensión por seis meses.
El número
secuestrado publicaba en su primera página una fotografía del Rey de España
extendiendo su mano para estrechar la de Wilson Ferreira, líder blanco en el
exilio y bestia negra de los militares uruguayos.
Ante el
desagrado del ministro español de Asuntos Exteriores por el secuestro, el
canciller uruguayo adujo que Ferreira era un delincuente, a lo que Fernando
Morán tuvo que replicar que el Rey de España no tenía por mejor costumbre
recibir y saludar a los delincuentes.
La ulterior
suspensión de la revista por seis meses provocó serias disensiones en el seno
del Partido Blanco.
Un sector
radical ha propuesto la ruptura del recién iniciado diálogo con los militares
(diálogo que de alguna forma los legitima) y otro sector está por hacer de
tripas corazón y continuar las reuniones, pese a lo que se estima que son
provocaciones del Gobierno.
Se alcanzó
una fórmula intermedia, consistente en no acudir solamente a la reunión de
mañana, pero sin romper el diálogo.
Los
militares, celosos de su estima, se han adelantado suspendiendo ellos la
reunión. Se ignora cuándo se reanudarán las conversaciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario