Los toros son la Fiesta
Nacional como lo demuestra que estemos haciendo el tarambana con que sí o que
si no en medio de un marasmo de casi cinco millones de parados. Ya se sabe que
las mujeres y los niños primero aquí si se hunde el Titanic o degollamos al
toro o lo embarcamos en la primera lancha salvavidas. El Parlamento de Cataluña
se miente así mismo porque no pretende defender a los animales sino expulsar de
Cataluña lo que consideran un símbolo españolista. Para española la acreditada
afición barcelonesa a los toros, que se desmaya ante José Tomás. El toro como
pretexto.
Entiendo que en Brasil,
Chile, Uruguay, Argentina estén penadas las corridas de toro pero es que allí
la carne de res es sagrada porque es su principal comida y no se puede jugar
con ella. La carne no se torea y, además, la liberación de adrenalina provoca ese
sabor violento que algunos sadomasoquistas degustan en el rabo del toro.
No voy a una corrida de
toro ni para cobrar una herencia pero creo que la afición tiene derecho a su
festejo. Los radicales catalanes lo único que han conseguido es que Esperanza Aguirre,
Presidenta de Madrid, se haya lucido con una capa y blindado el toreo en su
terreno. Y a todo esto:¿ qué opinan los toros?
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