La guerra entre hutus y
tutsies en los Grandes Lagos africanos
dejó más de 70.000 muertos y todas las atrocidades cometidas empalidecieron al
genocidio de Sebreninka. Uno de los
gestores de la matanza fue Paul Kagame, presidente actual de Ruanda, que vino a Madrid de la mano de Ban Ki- Moon,
secretario General de las Naciones Unidas a una exotérica cumbre sobre los
objetivos del desarrollo del milenio, otra de las misteriosas iniciativa que
patrocina ZP. Está procesado en Francia y España pero le alcanza la inmunidad
de la presidencia de un país donde acaba de aparecer decapitado un líder de la
oposición. Quiero guardar la fotografía estrechando la mano de Kagame. Zapatero
no teme ni al ridículo y tampoco al mal fario. Se servirá carne asada en el
Palacio de La Moncloa; dicen que la humana tiene un sabor dulzón. Por el
contrario los exiliados cubanos liberados de las mazmorras y las torturas son
acogidos ellos y sus familiares como si hubieran llegado en patera desde la
Isla. Alojados de precario les han dado una paga de 490 euros el gobierno les
regala a los Hermanos Castro- o lo han pactado- no darles el asilo político que
les corresponde. La Madre Patria siempre ha sido “
la madrasta ” y , ya se sabe,
Cuba es una democracia singular. Éstos cubanos vienen a hacer turismo, como
Kagame.
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